De guerras y de héroes

De arantxa - noviembre 19, 2010

Los australianos son especiales, y lo son hasta en la forma de celebrar el día más importante de su calendario: el ANZAC day. Este día es la fiesta nacional, sería el equivalente al 12 de octubre español.

Pues bien, es un día de desfiles militares y de galletas, sí de galletas porque hay unas especiales que se preparan para ese día, aunque no vamos a liarnos ahora con temas culinarios.

Cuando digo que son especiales, es que en el ANZAC (Australian and New Zealand Army Corps) day se conmemora a los veteranos australianos y neozelandeses que lucharon en el bando de los aliados en la Primera Guerra Mundial en la batalla de Gallipolli en Turquía. Y pensaréis ¿qué tiene eso de especial? ¡Más historietas de veteranos de guerra!, ya estamos como los yankies. Bueno pues tiene de especial el que la batalla que se conmemora la perdieron, y no sólo que la perdieron, si no que les dieron "p'al pelo" Fue una masacre, murieron miles de soldados (unos 70.000) y los que quedaron vivos tuvieron que salir por patas.

La mayoría de los países celebran sus logros. España el descubrimiento de América, casi toda América del sur la independencia de los Españoles, EEUU la independencia de los ingleses.... Australia is different!

Siguiendo con el tema de batallitas y héroes, aquí no tienen como héroe ningún gran general que ganase o aplastase a ningún enemigo, aquí el héroe nacional (a parte de Cocodrilo Dundee) es el Soldado del Burro.

El Soldado del Burro (John Simpson Kirkpatrick) era un camillero ANZAC que desobedeciendo órdenes de los superiores y haciendo oídos sordos a los consejos de los compañeros, se dedicaba a ir con su burro en busca de heridos en combate para llevarlos a los puestos de socorro. Finalmente fue acribillado en una de sus misiones, después de conseguir montar a un herido a su burro. El animal consiguió llegar hasta el puesto de socorro con el herido.

Batallitas aparte, otro tema a destacar de estos australianos es lo relajaos que son. Al desfile acuden el Primer Ministro, jefe de la oposición, Embajadores, en fin, lo típico en estos actos. Bueno pues no se ve ni un helicóptero dando vueltas ni miles de policías alrededor. Se ven australianos, pero también mucho guiri como nosotros.

Según nos estábamos acercando al War Memorial que era donde terminaba el desfile, una chica de la organización muy amable, como casi todos los australianos, nos pregunta que si queremos sentarnos dentro del recinto. ¡El mismo donde se van a colocar todos los peces gordos! Obviamente dijimos que sí. Pensamos que al ir con mochilas, como mínimo, nos las registrarían, pero qué va, allí pasamos y nos sentamos sin nadie que nos mirara dos veces. Es extraño estar en un país donde no piensan en que cualquiera puede llevar una bomba en la mochila y cargarse a la mitad del gobierno en un periquete. Bueno pues ya estábamos dentro con los importantes ;)